Aquí nos encontramos otro año más, a la espera de una época del año tan esperada por todos como es la Navidad, a las puertas de un nuevo año que no sabemos qué nos deparará, y que esperemos sea más benévolo que el presente 2014...
Como es bien sabido por los amantes de la cultura clásica, la Navidad es un compendio de festividades paganas adaptadas al cristianismo tras la adopción de este como religión oficial de Imperio Romano, pues se sabe que Jesucristo no nació en estas fechas (Si es que es cierto que llegó a existir). Aun así, para que los habitantes del Imperio que aún se aferraban a la antigua tradición politeísta adoptasen este nuevo credo, se hizo coincidir ese acontecimiento tan importante en su calendario con las fiestas de las Saturnales, llamadas así por el hecho de que se celebraban en honor a Saturno, dios romano de la agricultura, y en las cuales se hacían grandes banquetes y bacanales. Era también costumbre que por estas fechas se cambiarán los papeles de señor y esclavo, y que se hicieran regalos entre todos.
Aunque esa es tan solo una de las tradiciones paganas que perduran en la Navidad como la conocemos hoy, ya que la colocación del famoso árbol navideño proviene de una antigua costumbre de los países nórdicos.
Con todo, estas son fechas en las que, sea por el motivo que sea, las familias se unen (o no), y se crea un ambiente general de prosperidad y felicidad, si no tenemos en cuenta el imponente negocio que esta "armonía social" supone para las grandes empresas comerciales...
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